Usando asana.. en equipo

Como he dicho en el pasado, soy un nerd de las herramientas de productividad. He probado y cambiado de herramientas y sistemas muchas veces a lo largo de mi vida. Inclusive hasta he llegado a mantener más de una en paralelo para ver qué ventajas tenía cada una. Confieso también que he probado algunas más de una vez. Esto que no deja de ser un defecto, me da una ventaja: las conozco.

Desde ese conocimiento, hace un tiempo, he comenzado a expandir ciertas prácticas personales a los distintos equipos de los que formo parte (tanto en mi costado laboral, como personal). Sencillamente creo que cuando uno encuentra esquemas de trabajo que pueden servile a otros, tiene el deber de difundirlos.

Es así como en el trabajo comenzamos a usar Asana. Pasamos por otras previas pero esta, cuajó. Siendo este un hecho no menor. Uno de los puntos importantes a la hora de establecer prácticas de trabajo más ágiles, justamente, es el de la adopción de la herramienta. Cuando hablamos de equipos de trabajo, a diferencia de lo que nos puede pasar en el plano individual, el costo de cambiarla es mucho mayor. Es por eso que ni se me ocurre cambiar y por el contrario, busco maneras de potenciarla o de paliar sus limitaciones.

Dicho esto, procuraré ir contándoles que cosas buenas vamos logrando con la herramienta.

Seguimos pensando..