¿Tenes a Dr. House en tu empresa? Acostumbrate ..

Soy un gran fan de las novelas policiales. He leído muchas (desde las más clásicas hasta las más modernas). Me encanta esa estructura de "situación imposible, investigación y resolución magistral del crimen con todos los implicados presentes" totalmente previsible pero que te atrapa en los detalles. El cuarto herméticamente cerrado, la historia de cada personaje en relación a la víctima y en particular el detective. Ese personaje que resuelve el crimen como si fuera un mago, o un semi-dios.

Cada autor tiene uno de cabecera, que permanece en la mayoría de sus obras. Agatha Christie tenía a Poirot, Dickson Carr tenía dos (Gideon Fell y Sir Henry Merrivale), Sir Conan Doyle tenía a Sherlock Holmes, etc., etc. Usualmente se trata de un personaje excéntrico, medio mal llevado en algunos casos, fóbico en otros. Pero que siempre es dueño de una inteligencia y una perspicacia sin igual. Una versión moderna de este mismo juego, en la era de la televisión, es Dr. House por supuesto. Otro es Monk.

¿A qué viene toda esta introducción? A que tengo una teoría: 

En el mundo de la consultoría existen personajes similares a Dr. House.

Es decir, consultores "diferentes" que saben (o entienden) muchísimo de ciertos temas y que aportan valores únicos a la organización o al equipo de trabajo donde pertenecen. A continuación enumero 6 razones por las que son necesarios:

1. Nos ahorran tiempo con su sabiduría.
2. Proporcionan una visión única ante ciertos problemas.
3. Nos transmiten seguridad cuando se involucran en ciertos proyectos aunque más no sea para revisar lo que hacemos.
4. Son referentes para mucha gente, es decir guías, modelos a seguir, motivación para que la permanencia, maestros de quien aprender, etc.
5. Son adorados por los clientes.
6. Forman parte de la oferta de valor, marca o posicionamiento.

No podemos tener cientos de estos pues manejar sus excentricidades lleva su tiempo, pero tenemos que aprender a valorarlos y utilizarlos de la mejor manera posible.

Seguimos pensando..