El fenómeno “hágalo usted misma” #off-topic
El otro día, gracias a un comentario de una amiga en Facebook tuve una revelación. Como no estaba relacionada con el ámbito profesional, la publiqué en Facebook. Pero luego mi amigo Maxi me acusó “de un crimen que no cometí” (decía que usaba el Blog para cosas no profesionales) y decidí cometer el crimen para que se enoje más. Aquí abajo lo que escribí: Cuando mi primer hija nació una gran cantidad de cambios se produjeron en mi esposa. Algunos visibles rápidamente y otros más sutiles. Dentro de los primeros podemos citar a sus prioridades (antes del nacimiento yo estaba en su top ten y cuando nació la niña, yo y otras 9 cosas, tuvimos que corrernos), sus patrones de sueño (pasó de ser indespertable-casi-muerta a saltar de la cama al menor quejido de la bebé) o la veta culinaria (antes no cocinaba ni una tostada y luego se despachó con toda una serie de platos que al momento de casarme no habría soñado). En la lista de los menos obvios hay uno en particular que llegó con el primer cum