Un antes y un después en la consultoria

Antes el cliente planteaba un problema, un desafío o una duda, y el consultor relevaba, investigaba y analizaba hasta dar con una respuesta. Usualmente el consultor trabajaba solo y el cliente a lo sumo respondía preguntas. Al final el consultor daba la respuesta y el cliente emitía opinión sobre el resultado del trabajo.

Hoy la consultoria se aborda con un enfoque distinto, producto del aumento de velocidad de cambio que el mundo está experimentando.

En primer lugar hay colaboración, co-creación y trabajo en equipo con el cliente. Antes el consultor tomaba al cliente como un objeto de estudio. Hoy no se trata de un especialista -o entendido- evaluando a un paciente u objeto de estudio.

En segundo lugar el enfoque de trabajo cambió. Antes las soluciones se planteaban casi exclusivamente desde el punto de vista técnico. Hoy el eje humano ha crecido considerablemente (en algunos casos inclusive sobrepasando al técnico). Un ejemplo de esto es el desarrollo de software donde los aspectos humanos de interacción y coordinación en proyectos de medianos a grandes resultan más importantes que los desafíos técnicos particulares.

En tercer lugar la dinámica es diferente. Los proyectos actuales se plantean con un nivel mayor de incertidumbre y experimentación, son iterativos y principalmente más cortos.

Estamos ante una nueva realidad y debemos adaptarnos. La buena noticia es que los proyectos son más divertidos que nunca!

Seguimos pensando..