No te relajes, estamos cerrando..

Alguna vez escuché por ahí que el 90% de los proyectos están, el 90% del tiempo, al 90% de su avance. Es como si algunos equipos de trabajo quisieran rápidamente llegar a la etapa de cierre de proyecto para poder sentirse relajados y con el fin cerca. Hay situaciones donde la ansiedad es inevitable pero es importante trabajar sobre este punto pues corremos el riesgo de cometer dos errores críticos.

El primero es apurarnos por estar en un lugar distinto al real. Los proyectos deben ser vividos etapa por etapa. Cada una tiene su propia importancia, dinámica y razón de ser. Siempre digo que es conveniente empezar los proyectos con cierto sentido de urgencia pero de ahí a ser atolondrados hay cierta distancia.

El segundo es querer estar en el final para poder relajarnos. Estar en el cierre de un proyecto no significa "aflojar". La tensión de proyecto debe seguir. El foco debe mantenerse e inclusive incrementarse. El proyecto no se termina hasta que se termina, es decir, hasta que el o los stakeholders nos dan un ok formal al cierre (pregúntenle a los escoceses luego del partido con los pumas!).

Para cerrar les doy 3 pistas para darse cuenta si están "demasiado relajados" en el final de un proyecto:

1. Están pensando en liberar parte del equipo porque creen que no lo van a necesitar.
2. Ya están trabajando en el nuevo proyecto para ganar tiempo.
3. Corrieron algunas fechas y han pospuesto algunas tareas que consideran triviales dada la altura del proyecto.

Seguimos pensando..