#consultip 187. A veces hay que ofrecer el fin de proyecto

A veces los clientes creen que los proyectos o servicios no marchan bien. Tienen la sensación de que no estamos aportando suficiente valor, tienen dudas, tienen comentarios, tienen objeciones. En esos casos es nuestro deber escuchar y tratar de mejorar lo que está funcionando mal o de explicar lo que no se entiende bien o de comunicar mejor los “por qué” de lo que hacemos.

No obstante, a veces no es suficiente y el cliente sigue insatisfecho. En esos casos se impone ofrecer el fin de proyecto. No inmediatamente, no por cualquier cosa, no como método sistemático para contrarrestar los comentarios.

Ofrecer el fin de proyecto da la posibilidad al cliente de poner en perspectiva sus objeciones. Si son de fondo, el fin de proyecto es lo mejor para ambos. Si la relación entre ambos es madura y a largo plazo, cerrar un proyecto que no va a buen puerto es una forma de cuidarse mutuamente.

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